En la actualidad hay diferentes tipos de radares, con los que la Dirección General de Tráfico (DGT) puede comprobar la velocidad a la que circulan los vehículos por las carreteras españolas. Por un lado están los radares fijos, que se mantienen siempre en la misma posición, y, por otro lado, tenemos los radares móviles que pueden instalarse fácilmente en cualquier ubicación o estar presentes en vehículos de la policía.
A estas dos clases se suman también los radares de tramo, una modalidad algo distinta a cualquiera de ellos, tanto en su funcionamiento como en su instalación.
Contenidos
Un radar de tramo no mide la velocidad de forma directa, sino que mide el tiempo de paso de un vehículo en un espacio concreto, es decir, en un tramo de carretera. En lo que se identifica como la entrada de tramo se coloca una o varias cámaras (pueden ser de distinta tipología). En lo que se considera el final de tramo igualmente se coloca una o varias cámaras.
Estos dispositivos están conectados entre sí y vinculados a un mismo sistema informático. Calculan la velocidad media que se puede alcanzar dentro de los límites legales para recorrer ese tramo por un vehículo. De esta forma, la primera cámara registra la entrada del vehículo en el tramo, a través del número de matrícula. La última cámara es capaz de detectar esa misma matrícula (incluso si ha cambiado de carril) y establece la velocidad a la que ha circulado, en base al tiempo que ha tardado en superar el tramo.
Si el tiempo es menor al límite calculado por el radar de tramo, se impone una sanción por rebasar el límite de velocidad. Hay que tener en cuenta que, a diferencia de otros radares, aquí no se indica la velocidad a la que se circula pues calcula una media de tiempo.
Como hemos indicado, los radares de tramo realmente lo que miden es el tiempo de paso más que la velocidad de un vehículo. En cualquier caso, de forma técnica la velocidad calculada es una media de la que ha mantenido el vehículo, según el tiempo que ha tardado en recorrer el tramo en cuestión.
Es decir que, en teoría, se puede rebasar el límite de velocidad y luego circular muy despacio, si de esta forma se recorre el tramo dentro del tiempo establecido. Obviamente a nivel práctico es algo muy difícil de lograr. Lo que sí se ha impuesto en relación a los radares de tramo es la prohibición de rebasar en 20 Km/h el límite de velocidad para hacer adelantamientos en carreteras convencionales, precisamente porque era el argumento utilizado por algunos conductores al recibir una sanción de este tipo de radares.
Según los últimos datos ofrecidos por la DGT, el listado de radares de tramo en España alcanza la cifra de 92 en total. Las provincias en las que están instalados son las siguientes:
Podrás saber que hay un radar de tramo al ver una señal de fondo azul y letras en blanco, que tenga un mensaje similar a «control de velocidad en tramo». Se indicará también la distancia del tramo que estará vigilada.
Uno de los varios alicientes que hay a la hora de adquirir un vehículo eléctrico…
La venta de coches eléctricos en España mantiene un ligero crecimiento. El ritmo es constante,…
Muchos conductores que están interesados en la movilidad eléctrica se preguntan si es posible cargar…
Según la Federación Española de Vehículos de Movilidad Personal (FEVEMP), en España hay más de…
El carnet de conducir tiene un periodo de vigencia, es decir, que cada cierto tiempo…
El año 2024 trae cambios importantes en el carnet de conducir y en toda la…