Los tipos de baterías eléctricas para coches

Durante 2020 y teniendo en cuenta las dificultades de este año la venta de coches eléctricos en España ha crecido un 78,4% con respecto a 2019. Se han vendido 17.925 modelos de este tipo de vehículos. Uno de los motivos por el que los coches eléctricos cada vez tienen mayor atractivo para los compradores es la calidad de las baterías eléctricas. Son cada vez más eficientes, económicas y tienen una mayor durabilidad. El cóctel perfecto para que el coche eléctrico por fin pueda consolidarse en el mercado.

El boom de las baterías eléctricas

Hay varios motivos por los que las baterías eléctricas de estos coches están cobrando protagonismo. A nivel económico representan uno de los mayores costes en la fabricación de los coches eléctricos. Su abaratamiento permitiría reducir el precio de estos vehículos y hacerlos más competitivos en el mercado.

Durante los últimos 8 años la tendencia del precio de estas baterías ha sido a la baja. Su coste ha descendido en un 80%, una de las razones principales por las que cada vez se venden más coches eléctricos. La estimación del sector es que esta tendencia continuará hasta igualar los precios de las baterías de un coche convencional, algo que podría suceder en menos de cinco años.

Por otro lado, la autonomía y el rendimiento de un coche eléctrico se basa en buena medida en sus baterías. Cuanto más eficientes sean, mejores prestaciones ofrecerán estos vehículos. La inversión en nuevas tecnologías que permitan aumentar la autonomía de las baterías está exponiendo un futuro prometedor. Se habla de coches eléctricos con el triple de autonomía que actualmente, con ciclos de carga mucho más rápidos, eficientes y económicos. Si precio y rendimiento consiguen cumplir los objetivos el boom de las baterías eléctricas que ya vivimos podría impulsarse más de lo que jamás habríamos imaginado.

Tipos de baterías

La búsqueda de baterías eléctricas más eficientes y económica ha motivado también el desarrollo de diferentes tipos de estos elementos.

Estos son los tipos de baterías que actualmente podemos encontrar en el mercado:

Baterías de plomo-ácido (SVRLA o Pb A P)

Es la batería de coche eléctrico con más tiempo en el mercado. La relación entre el coste que implica su instalación y el rendimiento que ofrece la hace una de las más equilibradas. Tienen una alta durabilidad y óptimas funciones de carga y descarga. Sin embargo, son bastante grandes lo que condiciona el diseño del vehículo y su recarga es más lenta que otras alternativas.

Baterías de iones de litio (Li-ion)

Las baterías de iones de litio destacan por su rendimiento y por su durabilidad. Son menos pesadas que otras alternativas y permiten más números de ciclos de recarga. En cuanto a eficiencia no tienen rival por lo que la mayoría de coches eléctricos se fabrica pensando en el uso de este tipo de baterías.

Baterías de níquel cadmio (Ni-Cad)

Fueron de las primeras baterías para coches eléctricos en los años 90. En aquella época destacaban por su rendimiento y como alternativa al monopolio de coches de combustión. Hoy en día sus prestaciones no son comparables a las baterías de coches eléctricos nuevos, por lo que no es muy corriente verlas en cadenas de montaje.

Baterías de níquel-hidruro metálico (Ni-Mh)

En el mercado eléctrico, los coches híbridos también están aumentando su presencia. Las baterías tienen de nuevo un papel protagonista. Estas baterías de níquel-hidruro metálico ofrecen un alto rendimiento y muy bajas emisiones contaminantes.

¿Cuáles son las mejores?

Las baterías de iones de litio son las más eficaces y las que mejor relación calidad-precio pueden ofrecernos.

Las baterías de plomo-ácido también son bastante eficientes, pero su tamaño y peso son factores en desventaja con respecto a los de iones de litio.

Una batería de ion-litio puede llegar a pesar hasta 4 veces menos y su durabilidad es considerablemente superior. Por estos motivos es el tipo de baterías que más coches eléctricos llevan actualmente.