El aire acondicionado es un accesorio muy importante de nuestro vehículo, para disfrutar de un confort apropiado, sobre todo si conducimos en épocas de altas temperaturas.
La óptima climatización del habitáculo también ayuda a mantener la concentración en la carretera, por lo que es útil incluso a nivel de seguridad.
Sin embargo, es un recurso limitado. Con el tiempo se gasta o puede averiarse. Te contamos cómo cambiarlo y cuándo deberías hacerlo para disfrutar siempre de él cuando estés conduciendo.
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Cómo cambiar el filtro del aire acondicionado
Como cualquier sustitución de piezas o recambio, lo ideal para cambiar el filtro del aire acondicionado es acudir a un taller especializado.
No obstante, sí que es uno de los componentes que puedes cambiar por tu cuenta, si tienes los recursos apropiados y (preferiblemente) algo de experiencia con la mecánica.
Estos son los pasos a seguir para cambiar el filtro del aire acondicionado:
- Comprueba que el aire acondicionado se ha descargado totalmente.
- Comprueba las bobinas de condensación y confirma que están limpias.
- Añade la cantidad de aceite y refrigerante apropiados, según las instrucciones del fabricante.
- Conecta el kit de carga a los sistemas de alta y baja presión. Luego vacía de aire todo.
- Conecta el refrigerante a la manguera de carga.
- Abre la válvula de baja presión para cargar todo el sistema.
- Al terminar la carga, enciende el coche y el aire acondicionado. Este paso hace que el gas vaya entrando.
- Comprueba los niveles de presión, según las instrucciones del fabricante.
- Quita la primera botella y purga la manguera.
- Coloca la siguiente botella para una carga completa.
- Retira el kit de carga y cierra la tapa del motor.
- Comprueba que el aire acondicionado funciona correctamente.
Cada cuánto cambiar el filtro del aire acondicionado
Por lo general, el aire acondicionado en el coche puede durar hasta 2 años sin necesidad de ninguna recarga o cambio. No obstante, esto depende mucho de cada vehículo y también del uso que demos al sistema.
El Real Automóvil Club de España (RACE) considera que lo más apropiado es cambiar el filtro del aire acondicionado todos los años.
La recomendación general es que, si llevas a revisión tu vehículo, los profesionales del taller comprueben el estado del aire acondicionado para poder ofrecerte el mejor asesoramiento sobre cuándo es apropiado cambiarlo.
Tipos de filtros de aire acondicionado
En la actualidad hay numerosos tipos de filtros de aire acondicionado. Estos son los más frecuentes:
- Filtro de aire de papel (o celulosa): uno de los más tradicionales, que además es económico y reciclable. Su eficiencia se basa en parte en los numerosos pliegues que tiene, con los que puede filtrar más volumen de aire.
- Filtro de aire HEPA: es una innovación en el sector, que se basa en tecnología HEPA (High Efficiency Particulate Air), un tipo de filtro que garantiza máxima retención de partículas.
- Filtro de aire de algodón: se basa en capas de algodón prensado que se fijan con una malla metálica. Algo más costosos, pero también más duraderos. Son más habituales en vehículos deportivos o de alto rendimiento.
- Filtro de aire de espuma (o foam): basado en espuma de poliuretano que tiene la ventaja de lavarse muchas veces y una capacidad de filtrado superior a otras alternativas.
- Filtro de aire textil: basado en un tejido de alta porosidad, de gran eficiencia y que puede lavarse para su reutilización.
Filtro de aire de malla metálica: solución ideal para pequeños espacios, basado en un funcionamiento similar al de las campanas extractoras de las cocinas.
